martes, 8 de noviembre de 2011

Asumir retos vs. Correr riesgos


“Si lo puedes soñar, lo puedes hacer.”
Walt Disney.


La literatura sobre emprendedores presenta casos de personas que desde abajo, han logrado construir y alcanzar grandes hazañas. ¿Qué hizo a estas personas y qué características se encuentran en los verdaderos emprendedores? Aquí presento algunos ejemplos que encontré:

·         El padre de Henry Ford siempre se mostró escéptico ante las ambiciones de su hijo y su sueño de construir una fábrica de automóviles. El propio Ford recordaría las palabras de su padre: “Nunca alcanzarás el éxito con eso. Nunca se venderán”. La enorme afición de Henry Ford por la mecánica y su obsesión por construir un “carro sin caballos”, le llevaron a ser apodado entre sus vecinos como “El Loco Henry”. Cuando Ford paseaba al volante de su primer prototipo automovilístico (en 1896), la multitud lo rodeaba entre gritos y risas. “Sí, loco”, decía él tocándose la sien con el dedo- “loco como una cabra”. Poco después se convertiría en uno de los hombres más ricos del mundo.

·         Apple Computer, uno de los grandes gigantes de la informática, fue fundada en 1975 en un garaje de Cupertino (California) con muy poco dinero, por Wozniak y Jobs.

·         La multinacional Nestlé tiene su origen en una pequeña tienda de yogures de Zurich.

·         Leopoldo Fernández Pujals inició su aventura empresarial abriendo una pequeña pizzería en Madrid. Diseñó las recetas de sus pizzas a base de darlas a probar una y otra vez a los niños de su barrio y conocer sus opiniones. Durante sus inicios se encargó de todas las tareas del negocio: desde preparar la masa, hasta servir un pedido o barrer el suelo de la pizzería. Hoy su empresa, Telepizza, da trabajo a 13.000 personas.

·         Walt Disney, fundador de Disney Company, se encontraba tan falto de medios en sus comienzos que en sus primeras películas doblaba con su propia voz al ratón Mickey.

¿Y usted cree que ninguna de estas ideas tuvo un alto nivel de riesgo en un principio? Comúnmente la teoría dice que el riesgo está muy relacionado con la cantidad de información que se tiene, con respecto a lo que se quiere lograr. Se dice que las personas toman decisiones en situación de riesgo cuando los datos que se tienen no generan la suficiente certeza de que el resultado se va a dar.

En este orden de ideas, todo el tiempo estamos corriendo riesgos. Es imposible saber exactamente lo que va a pasar al emprender un nuevo camino y cuando se ha decidido asumir y enfrentar un reto, claramente hablamos de resultados desconocidos, provenientes de un cambio.

Depende mucho de usted y del foco que tenga con respecto a esa acción que va a ejecutar para lograr lo que quiere y si usted es de las personas que añora un giro de 180 grados en su vida, pero le teme al riesgo, es muy factible que esté incongruente y un poco desfasado de la realidad.

¿De qué manera puede minimizar estos sentimientos? Concentrándose cien por ciento en la ganancia que le va a generar el logro del reto propuesto, diferente a enfocarse en la posibilidad de que algo salga mal.

En transacciones bursátiles, por ejemplo, se habla de que el 50% de las operaciones tienen posibilidad de ganancia, y el otro 50, de pérdida. El secreto siempre va a estar en la administración del riesgo, preguntándose cuánto está dispuesto a arriesgar.

El emprendedor de éxito, cuando decide abordar un proyecto empresarial, lo hace calculando al máximo los riesgos que conlleva, analizando en proyecto y su entorno, teniendo claro el resultado previsible de su operación. Además, con su gestión y esfuerzo personal, intentará poner todas las posibles circunstancias a su favor para evitar riesgos innecesarios.

De acuerdo con lo planteado anteriormente, siempre el riesgo será directamente proporcional a la ganancia en cualquier actividad humana, por lo tanto, quien asume más riesgo, aunque con menos probabilidad de éxito, tendrá la oportunidad de recibir una mayor recompensa en el largo plazo, además de la satisfacción de no quedarse y mirar como otras personas si obtienen metas que para otros parecerían inalcanzables.

Creer en sus propias capacidades, conocimientos y habilidades, valorarlas, y ser coherente con ellas en todo momento, es otro de los aspectos que debe tener muy claro y presente. Este aspecto le proporcionará confianza en sí mismo y en sus ideas.

Trabajar por un sueño puede parecer una cuestión ideal, ser independiente o su propio jefe, una bendición; sin embargo, son muy pocas las personas que deciden lanzarse a aventurar con sus ideales, sus proyectos, sus sueños, sus visiones o sus propios negocios; es evidente que el camino es difícil, pero, ¿Por qué no arriesgarse?

Técnicamente se dice que a mayor riesgo, mayor rentabilidad de un negocio. Jamás asuma un nuevo reto sin estar dispuesto a enfrentar un riesgo. Controle la emoción, controle su voz interior y dé este nuevo paso absolutamente convencido de que las cosas van a suceder como usted quiere.

Ricardo Gómez.

*Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a ricardo@evolvo.info y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados extraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que logre lo que quiere.

1 comentario:

  1. Importante hacer caso al yo interior y no dejarse llevar por los miedos de los que nos rodean, que a veces nos paralizan y nos convierten en seres temerosos y pusilánimes.

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